En Cochabamba, el sistema tarifario del Servicio Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (Semapa) impone la misma tarifa a aquellas familias que consumen 12 mil litros de agua y a las que ni siquiera han abierto el grifo.
Suman las denuncias de vecinos que, pese a sufrir racionamiento en la provisión de agua, continúan pagando el mismo monto de dinero que cuando tenían un servicio regular de Semapa.
Las razones las explicó el gerente de Semapa, Gamal Serhan. “Las tarifas no las aprueba Semapa, sino la AAPS (Autoridad de Fiscalización y Control Social de Agua Potable y Saneamiento Básico) y, lamentablemente, me heredaron una estructura tarifaria que cobra lo mismo a los que consumen cero o 12 mil litros”.
La estructura tarifaria actual tiene varias categorías determinadas según la apariencia o material de construcción de la vivienda, pero no así por el total consumido.
En este sentido, Semapa viene trabajando en una nueva estructura que esté determinada por el nivel de consumo. La propuesta se encuentra todavía en la etapa de estudio técnico. Antes de su implementación, la nueva estructura debe ser aprobada por la AAPS.
Sin embargo, para este cambio se requiere que toda la población cuente con medidores de agua y que los que ya los tengan, los renueven.
En Cochabamba, de los 74 mil usuarios de Semapa, alrededor de 64 mil tienen medidores, pero todos están obsoletos. “El tiempo de vida útil de un medidor es de cinco años. En Cochabamba, el más nuevo tiene 11 y el más antiguo 30 años”, señaló Serhan.
El costo de dicha renovación estará a cargo de Semapa. Serhan manifestó que desde septiembre empezará la compra e instalación de equipos.
“Lo que quiero es un programa paulatino para que en cinco años tengamos todo cubierto”, dijo.
El costo de estos medidores oscilaría entre 35 y 70 dólares. La autoridad espera que el directorio pueda aprobar los de mayor tecnología.
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