Ante la falta de agua en los barrios de la zona sur de la ciudad, los vecinos se esmeran en administrarla bien y reutilizarla.
Cecilia Orellana, del barrio Tierra de Esperanza, explica que la mayoría de los habitantes de la zona no tienen duchas y los vecinos se bañan utilizando baldes y economizando el líquido. Cuando lavan ropa, lo que queda del enjuague sirve para regar las plantas o para el baño.
Los carros cisternas trasladan alrededor de 10 mil litros en cada viaje. Esto abastece 50 turriles, cada uno de 200 litros.
Los barrios más alejados de la zona sur pueden considerarse nuevos. Algunos fueron fundados recién hace cinco años y carecen de servicios básicos como el agua. En cada cuadra hay al menos un par de viviendas en construcción.
Buena parte de sus habitantes, hombres y mujeres, es albañil.
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