Saturday, May 21, 2016

Baja el caudal de los pozos y comienza el racionamiento

El caudal de los pozos que abastece de agua a los pobladores de Quillacollo bajó en los últimos meses y la Empresa Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Quillacollo (Emapaq) comenzó el racionamiento.

Emapaq suministra agua potable al 30 por ciento de las familias que viven en el área urbana, las demás administran sus propios sistemas de pozos, a través de cooperativas y asociaciones.

El gerente de Emapaq, Yerko Arandia, explicó que cuentan con 33 pozos para abastecer con el servicio a los vecinos del centro de la ciudad. De acuerdo a los últimos análisis realizados confirmaron que algunas fuentes redujeron su nivel a la mitad, de 3 a 1.5 litros por segundo, por ejemplo.

Ante esta situación, Emapaq determinó restringir el servicio desde mayo, de siete a seis días por semana. En algunas zonas, como en Villa Moderna, los vecinos reclamaron porque no tuvieron agua durante dos días. “Como nunca antes en la historia del barrio”, expresó una vecina de la avenida Santa Cruz.

Yerko Arandia dijo que la política se generalizará. Lamentó el derroche que realizan los pobladores en época de crisis, ante la falta de control. Emapaq no cuenta con sistemas de medidores domiciliarios porque rige una facturación mensual fija de 10 bolivianos “cualquiera sea el consumo”.

El profesional mencionó la necesidad de modificar el sistema de cobro, de acuerdo a la cantidad de cubos usados. Dijo que hay vecinos que, incluso, riegan sus cultivos con agua potable. Otros tienen lavaderos de autos y fábricas de hielo.



COOPERATIVAS El caudal de los pozos que están a cargo de las asociaciones y cooperativas también disminuyó. En la Organización Territorial de Base (OTB) Antofagasta Norte, por ejemplo, la presión bajó.

Hasta hace dos meses la presión era tal que llegaba hasta un tercer piso, sin uso de bomba. Ahora no sube ni a las duchas. “La falta de lluvia es la causa de todo este problema”, lamentaron.

En Quillacollo las cooperativas y asociaciones tienen un sistema de facturación fijo. En la OTB Villa Esmeralda la tarifa mensual es 10 bolivianos.

Otras organizaciones han incorporado medidores y los cobros se realizan de acuerdo al consumo. Sin embargo, los precios no suben de los 20 bolivianos.

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