as represas de Hampaturi y Chuquiaguillo muestran una renovada expresión de vida, según pudo comprobarse en esos lugares. El nivel de sus aguas se encuentra cerca del tope de su límite desde el punto de captación del caudal, con lo que se alienta la esperanza de que La Paz tenga regular suministro de agua potable.
Durante un recorrido efectuado por EL DIARIO a ambas represas, se pudo verificar que han retornado casi a la normalidad, en el nivel de sus reservas.
PREOCUPACIÓN DESPEJADA
Con ello, se despeja una de las mayores preocupaciones públicas, pues a partir de noviembre del pasado año constituyó asunto de prioridad para los paceños, especialmente de las zonas afectadas por el racionamiento de agua, vigente aún a la fecha.
No obstante que las represas que nutren el sistema Pampahasi han llegado casi al total de su nivel, tal como hubiera ocurrido el pasado año, la Empresa Pública Social de Agua y Saneamiento (Epsas) continúa con el monitoreo de las represas, a fin cumplir la estrategia trazada, mediante el uso mesurado del agua, según se reiteró durante la visita al lugar.
REPRESA INCACHACA
En el caso de la represa Incachaca, cuya capacidad de embalse es de 5,5 millones de metros cúbicos de agua, en diciembre pasado su reservorio estaba agotado y los suelos agrietados por la intensa sequía. A diferencia de ese panorama, a la fecha es importante cantidad de agua que ingresa al reservorio.
Acompañan a este reconfortante panorama, pequeñas lagunas circundantes, con aguas que se hallan hasta el tope de su capacidad de almacenamiento. Constituyen parte de las reservas contabilizadas que aseguran el suficiente aprovisionamiento de la represa Incachaca.
REPRESA HAMPATURI
El caso de la represa Hampaturi es aún más reconfortante, el nivel de sus aguas se hallan al tope desde el punto de colecta para su depósito hasta el límite. Ambos repositorios muestran la plena restitución de la cantidad de agua que, naturalmente, deben tener.
El director ejecutivo de la Autoridad de Fiscalización y Control Social de Agua Potable y Saneamiento Básico (AAPS), Víctor Rico, señaló recientemente que la restitución de esta represa, que alimenta el sistema de distribución de agua potable de Pampahasi, cuenta con disponibilidad suficiente para auxiliar al sistema Achachicala, a la fecha más lento en la recuperación de sus represas.
La represa Hampaturi, cuya capacidad alcanza los 3,2 millones de metros cúbicos de agua, también está auxiliada por lagunas circundantes, que aportan por lo menos con un millón de metros cúbicos de agua, las que también se muestran recuperadas. Como es parte de la gestión de Epsas, este embalse también se encuentra sujeto a permanente monitoreo.
El recorrido por Hampaturi evidencia que la canalización de aguas del río Kairuni, de la comunidad de Palcoma, hasta la Estación Interruptora de Presión (EIP), opera con la eficiencia esperada. Sin embargo, los comunarios de Hampaturi esperan el cumplimiento de las ofertas que las autoridades locales les hicieron a cambio del agua.
La cancha de fútbol con césped sintético no tiene importantes avances, mientras que las tareas para proveer de agua potable a la comunidad de Hampaturi apenas empiezan con un censo de vivienda y número de familias, las que después podrán contar con el suministro regular del líquido elemento.
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