Plastiforte, una empresa que fabrica tuberías de HDPE (polietileno de alta densidad), ha consolidado más de 200 proyectos de agua potable que actualmente dan servicio a más de 110 mil usuarios, muchos de ellos en zonas periurbanas de bajos ingresos y ciudades intermedias del departamento de Cochabamba.
En esa misión, la empresa trabajó junto a instituciones de desarrollo como la Fundación AGUATUYA, Visión Mundial, Caritas Cochabamba, Mancomunidad de la Cuenca del Caine, Ingenieros en Acción Water for People y Etta Project, entre otros.
Plastiforte lleva 37 años en el mercado, pero Gustavo Heredia, su gerente actual, es un empresario joven y visionario que le dio una nueva perspectiva desde 1996, cuando incursionó con una estrategia renovada y una nueva forma de producir en la que prima el trabajo en equipo.
La solidez de una empresa depende de los valores de las personas que la integran. Por ello, Heredia destaca que al interior de su empresa se promueve la honradez, empatía, iniciativa y profesionalismo. "Toda persona que trabaja en Plastiforte debe vivir y demostrar con su ejemplo estos principios todos los días”, sostiene.
La OTB Miraflores se encuentra en el sector de Sivingani, al sur, a 30 minutos del centro urbano de Cochabamba. Allí, la empresa benefició con sus productos a vecinos que están agrupados en 90 casas -alrededor de 700 personas- que hace cuatro años viven en mejores condiciones de vida porque ahora gozan de un sistema de agua potable.
Teodora Quelale, de La Paz, esposa del dirigente de esa zona Juan Quispe, vino a la llajta para encontrar un mejor porvenir junto a su familia. Teodora dice que ahora tienen servicio de agua potable en su casa las 24 horas del día.
El barrio Sivingani-Miraflores es el ejemplo de un trabajo en equipo. Todo comenzó con el ahorro que pusieron en el banco, fruto de aportes personales y multas a vecinos que no cumplían con trabajos por jornal en favor del barrio. En cuatro años reunieron 45.000 bolivianos, que fue la base económica para comenzar el sueño de los comunarios de la OTB Miraflores, priorizando el agua como recurso natural vital en lugar de una sede social.
"Me siento orgulloso de estar en esta zona, donde las personas son bien unidas. Aunque discutimos en las reuniones de vecinos, siempre entramos en acuerdo para poder seguir adelante. Les doy un consejo a los jóvenes: que sigan trabajando, poniendo ganas para que nuestro barrio salga adelante, a seguir luchando por lo que queremos”, dice optimista Efraín Quispe, un joven de 20 años.
Urbanización modelo
Otro proyecto de alto impacto social en el que actualmente trabaja la empresa es la urbanización modelo de vivienda social Eco Santiváñez, cuyo objetivo es apoyar la construcción de viviendas para el personal facilitando el acceso a un lote y vivienda.
El emprendimiento está proyectado en una superficie de tres hectáreas, a dos kilómetros de la planta industrial de Plastiforte, en Santivañez, Cochabamba. Allí se pretende construir una urbanización ecológica en la que se realizará una gestión integral del agua así como la implementación de huertos familiares. Desde una perspectiva social y humana, la finalidad del proyecto es mantener a las familias unidas y mejorar la calidad de vida de los trabajadores.
El personal de Plastiforte recibe capacitación y entrenamiento profesional y técnico constante a través de cursos, diplomados y talleres, ya que, según Heredia, cuando se selecciona a los recursos humanos se lleva a cabo un proceso hasta encontrar la persona indicada para ocupar cada puesto de trabajo, pensando en que tenga toda la estabilidad laboral y se desarrolle dentro de la empresa a largo plazo.
Plastiforte fue la primera empresa en Bolivia en recibir el sello IBNORCA a la Calidad del Producto basado en la norma ISO 4427 (tuberías de polietileno para la conducción de agua).
También obtuvo, de la TÜV Rheinland (Alemania), la ISO 9001:2008 que calificó la implementación, seguimiento y mejora del sistema de gestión de calidad de la empresa.
Muchas empresas e instituciones de todo el país han optado por utilizar los productos de Plastiforte en sus proyectos. Entre ellas figuran municipios, gobernaciones, las empresas San Cristóbal, Sinchiwayra, Comibol, YPFB y entidades prestadoras de servicios de agua y alcantarillado como EPSAS, Saguapac, Elapas y Emapas.
El supertubo HDPE de Plastiforte sigue la tendencia mundial de emplear materiales amigables con el medio ambiente que protegen la salud de los habitantes y que conservan el recurso hídrico al no perder agua.
Además, la tubería HDPE asegura la construcción de sistemas que garantizan la reducción de pérdidas en la red, por ser productos cuyos métodos de unión son soldados por electrofusión o termofusión, dejando un sistema monolítico (una sola pieza), a diferencia de otros materiales del mercado que no cumplen con esta cualidad.
La empresa también ha consolidado una planta de producción de última generación en el Parque Industrial de Santiváñez, como resultado de la nueva perspectiva de sus ejecutivos que piensan que a través de una tecnología a la vanguardia se fabricarán productos de excelencia y alta calidad para un mercado más exigente.
CLIENTES, ALIADOS
La política de esta compañía es mantener a sus recursos humanos actualizados, capacitados y, sobre todo, motivados. Por ello, cada año se organiza una reunión corporativa en la que todo su personal realiza entrenamientos, talleres y dinámicas grupales.
Este año el encuentro llevó el lema "Juntos crecemos” y estuvo centrado en reflexionar sobre "calidad humana”. Se hizo, además, una presentación sobre el estado de la empresa y perspectivas para la gestión 2015-2016.
Mauricio Garrón, gerente de comercialización de la empresa, sostiene que "nuestros clientes son nuestros aliados, y queremos estar muy cerca de a ellos”.
Garrón dice que cuando las empresas o municipios acuden a sus oficinas para adquirir el supertubo HDPE, o la geomembrana, reciben estos productos con un valor agregado que es el asesoramiento profesional y técnico tanto en campo como en gabinete para la correcta instalación.
Garrón señala que la empresa lleva más de 15 años desarrollando soluciones innovadoras para garantizar sistemas de agua libres de fugas. De esta manera, las entidades prestadoras de servicios de agua logran mayor eficiencia y conservación del recurso hídrico.
"En Bolivia contamos con la tecnología, los recursos y las personas para elaborar productos de calidad internacional”, dice Heredia.
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