Hay escasez de agua potable en la ciudad de Cochabamba y aún no se tiene un plan inmediato de mitigación. El gerente del Servicio Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (Semapa), Gamal Serhan, informó que el caudal de las represas de Escalerani y Wara Wara es bajo y la dotación de Misicuni bajó más de 250 litros segundo a 150.
El déficit afectó la anterior semana a los usuarios de las avenidas Santa Cruz, Oquendo y la calle 16 de Julio. También de las zonas de Pacata y Sarco. El jefe de Distribución de Semapa, Diego Mejía, informó que la situación se regularizó ayer.
Dijo que no se puede dar a conocer el plan de redistribución de agua, porque sufre variaciones de acuerdo al caudal disponible.
Remarcó que las zonas del casco viejo y del norte reciben un promedio de dos horas de agua al día. En cambio, en lugares como Cerro Verde y otros del sur sólo la dotación es de dos horas cada cinco días debido a que la presión no es suficiente para llegar a sitios elevados.
La demanda de agua es de 1.894 litros por segundo. Este año, lo máximo que ha podido dotar Semapa fue 1.036 litros por segundo. Actualmente, el caudal ha disminuido considerablemente a casi 800 litros por segundo.
Ante esta situación la Alcaldía planteó la perforación de 10 pozos y transportar agua desde la represa de Corani en el municipio de Colomi hasta la ciudad de Cochabamba por una red de más de 60 kilómetros.
El alcalde José María Leyes explicó que los pozos podrían entregarse en febrero con una capacidad de 50 litros por segundo para mitigar la necesidad hasta que llegue el agua de Misicuni.
La escasez también se refleja en el aumento del costo del agua de las cisterna en casi un 50 por ciento. Las cisternas venden 10.000 litros en 170 bolivianos y un turril de 100 litros en 5 y 6 bolivianos de acuerdo con la distancia que recorren. La gente protege el agua con tapas de plásticos.
Suben pedidos para cisternas
La demanda de agua de los carros cisternas se incrementó en un 50 por ciento, según el servicio que prestan los transportistas ubicados en la zona de Cala Cala, donde se abastecen de un conjunto de vertientes naturales. El aumento se atribuye a la época seca y la escasez de agua de Semapa.
El presidente del Sindicato Manantial Tunari, Luis René Severich, informó que no pueden cubrir todos los pedidos por falta de tiempo y de caudal, porque las vertientes también se han secado.
Dijo que las cisternas proveen de agua a casi todas las zonas, pero especialmente a los condominios, restaurantes, hospitales, edificios y casas particulares del centro de la ciudad. También llevan agua a K’ara K’ara, Arrumani, Villa Pagador y Valle Hermoso. Severich informó que la época más crítica son octubre, noviembre y parte de diciembre.
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