Represa El Molino habilitará sus aguas para riego en 2016

El proyecto de la represa El Molino que el pasado martes 13 de enero de 2015 fue recibido de forma definitiva por la Gobernación del departamento de Tarija está ubicado en la comunidad de Carolina, en la zona de Iscayachi y requiere un monto adicional de 25 millones de bolivianos, a los 69 millones ya invertidos, para que las familias campesinas recién puedan utilizar sus aguas.

La obra que se inició en la gestión del ex gobernador Mario Cossío Cortez y fue concluida en la gestión de Lino Condori, aún está a medias debido a que no se ejecutaron los canales de riego secundarios para utilizar las aguas para la producción agrícola de al menos unas 14 comunidades del cantón Iscayachi, municipio El Puente.
El secretario de Obras Públicas de la Gobernación, Raúl Salazar informó que se viene realizando un estudio hídrico para definir la cobertura de agua que tiene la represa y en base a ese estudio, que pretende concluir en el mes de abril, definir si se amplía o no la canalización del proyecto de riego.
“Primero hay que ver la cobertura de agua, cuántos litros podemos captar y cuánto requiere primero el entorno de lo que es Iscayachi, me parece que estamos en un balance exacto no tendríamos disponibilidad de ampliar canales o dotar de agua más abajo, sin embargo el estudio va a decir si es viable o no una segunda fase de canales”, dijo la autoridad.
Con relación a la cobertura de riego, Salazar explicó que la represa El Molino fue habilitada para regar 900 hectáreas y no tiene la capacidad para dotar del líquido elemento a otras comunidades de la subcentral de El Molino y la zona de arriba de Tres Cruces.
El ejecutivo de la central provincial de El Puente, Osvaldo Fernández, informó que la recepción de la obra fue realizada sólo por la Gobernación y la empresa ejecutora “Consorcio Tarija”, sin la participación de la dirigencia campesina, ni lo beneficiarios.
“Desconocemos cómo se ha recibido esta obra y en qué condiciones se entregó la misma, además no sabemos qué están proyectando las autoridades para el uso de agua y qué planes para ampliar la cobertura de riego”, indicó el dirigente de la Zona Alta.
Ante esta situación, la dirigencia campesina de la Zona Alta decidió plantear en primera instancia a la Gobernación, la ejecución de la segunda fase de6l proyecto que contempla la habilitación de canales secundarios que distribuyan el agua a comunidades desde Carolina hasta El Molino y la zona de San Lorencito.
“Estamos preocupados porque las aguas se están yendo río abajo por falta de canales, y nuestros cultivos se están secando, por eso exigimos a la Gobernación la inmediata ejecución de los canales secundarios”, dijo Fernández.
Mientras la Gobernación concluye los estudios para la ejecución de canales, las familias campesinas demandan la dotación de tubería para llevar agua a sus cultivos y mejorar la producción porque consideran que la obra de canales concluirá el año 2016.
“Queremos que las autoridades nos doten de tubos y bombas para llevar el agua que se bota sobre el río Tomayapo a nuestros cultivos, porque la apertura de canales recién será el próximo año y nosotros ya no podemos seguir esperando el agua que llegue a nuestros huertos”, dijo.
La dirigencia campesina habría realizado un estudio junto a un equipo técnico de instituciones para encontrar cómo encarar a la segunda fase de canales secundarios y en este trabajo identificaron que se requiere de 25 millones de bolivianos para encarar el proyecto, en el afán de lograr que las aguas de la represa lleguen a beneficiar a las familias campesinas de todo el cantón, habilitando más de 1.300 hectáreas productivas.
Para abril de este año la Gobernación pretende concluir el estudio hídrico del proyecto, donde también se definirá si invertirán o no recursos en la canalización del proyecto.