El secretario de Relaciones de la Federación de Juntas Vecinales de El Alto (Fejuve), Rolando Huanca, denunció que al menos 30 urbanizaciones del Distrito 7 carecen del servicio de agua potable ya que los proyectos serían postergados por la Empresa Pública Social de Agua y Saneamiento (Epsas).
La molestia de los vecinos fue analizada en un ampliado de presidentes zonales la pasada semana, instancia que determinó dar un plazo a las autoridades de Epsas y del Ministerio de Medio Ambiente y Agua para definir la descentralización de la empresa en esta urbe y responder a los proyectos de servicios básicos postergados.
“El cabildo desarrollado en el Distrito 7 ha determinado varias medidas de presión a asumirse ante la postergación de los proyectos de agua potable por parte de Epsas, que deja sin atención a más de 30 urbanizaciones, donde cada una de ellas incluye cerca de 56 zonas y cada zona más de 100 familias”, indicó el representante vecinal.
Huanca lamentó que esta cantidad de familias en el Distrito 7 deba continuar consumiendo agua de pozo o comprando el líquido elemento de cisternas, que sólo aparecen una vez a la semana, siendo insuficientes e insalubres estos procedimientos para poder consumir agua potable.
A ello se suma que proyectos demandados, como la construcción de la planta de Tacachira, hasta la fecha no registren ningún avance de obra, factor que tendrá sus serias consecuencias cuando en la temporada seca más de cinco distritos, ubicados tanto en el norte como en el sur de esta urbe, queden con cortes de suministro de agua potable, explicó el entrevistado.
Para la dirigencia vecinal, desde la intervención de Humberto Claure en Epsas, gestión que inició en septiembre del 2013, no existe ningún proyecto que beneficie realmente a los diferentes distritos municipales, en especial al D-7.
“Es por eso que el Distrito 7 a determinado asumir la próxima semana medidas de presión, incluido el bloqueo de vías hasta obtener la expulsión del Claure quién deja postergados los servicios básicos requeridos por las urbanizaciones conforme como lo permite la Constitución Política del Estado (CPE), cuando establece que es el Estado es quien garantiza los servicios básicos”, remarcó.
Desde el pasado viernes, el Distrito 7 ha realizado movilizaciones de protesta en contra de la “desconcentración limitada” que asume Epsas en perjuicio de los proyectos de instalación de servicios básicos, siendo las medidas de presión dirigidas al Ministerio del Agua y al Ejecutivo del Gobierno Central con la finalidad de demandar “la descentralización con autonomía propia” de la empresa de agua en la ciudad de El Alto. Asimismo, protestaron debido a que la entidad manejaría entre 60 y 70 millones de bolivianos de los cuales sólo se destina Bs 10 MM en la desconcentración, factor que no abastece para la conclusión de ninguno de los proyectos demandados de la instalación de servicios básicos en esta urbe.
De acuerdo con el relato del representante vecinal, incluso la solicitud de instalación de agua potable cae en un proceso burocrático que ocasiona que los vecinos deban realizar una travesía y constante migración a la ciudad de La Paz, por el tiempo de siete meses para poder obtener el servicio.
El dirigente dio a conocer que queda pendiente la reunión con las autoridades del Municipio y del Ministerio de Agua, para definir el inicio del proyecto de la construcción de la planta de Tacachira, de lo contrario reiteró que se asumirán distintas medidas de presión.
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