El Sindicato de Trabajadores de Misicuni decidió desde hoy asumir medidas de presión porque el Consorcio Hidroeléctrico de Misicuni (CHM) no pagó los sueldos de noviembre en el plazo establecido, 6 de diciembre.
El CHM también se habría comprometido a pagar aguinaldos hasta mañana, según informó el representante de los trabajadores de Misicuni Francisco Medrano, quien se reúne hoy con sus bases en las oficinas del Consorcio para tomar otras determinaciones.
El Consorcio también tiene deudas pendientes con los trabajadores por los pagos a las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP), seguro de salud y ahora los aguinaldos. El Consorcio se habría comprometido a hacer efectivo los depósitos hasta el 10 de diciembre.
Con la decisión asumida por los obreros el reinició de las obras, paralizadas desde el 25 de noviembre, podrían demorarse. La Empresa Misicuni tenía previsto retomar el proyecto el 12 de diciembre.
Pese a que la Empresa Misicuni destinó hace unos días 1,4 millones de bolivianos para cubrir los salarios de los obreros del mes de noviembre, no pueden ser cobrados porque las cuentas del Consorcio “permanecen congeladas”, no tiene “capacidad de movimiento bancario debido a sus deudas pendientes”, dijo el asambleísta del Movimiento Al Socialismo (MAS) Marco Carrillo, quien sugirió al grupo empresarial que como una solución al conflicto se declare en quiebra.
El sindicato de trabajadores anunció que hoy alrededor de 90 trabajadores se concentrarán en las oficinas del Consorcio para exigir la cancelación de sus sueldos. También exigirán que sus dos aguinaldos sean desembolsados, como “máximo hasta el 10 de diciembre, como se acordó”, dijo el dirigente de los trabajadores, Francisco Medrano.
Manifestó que la situación en el campamento es de “total desolación y desesperación”, ya que se les habría terminado las raciones de alimentación, “no tenemos comida, estamos mal”.
Según Medrano, en el campamento no existiría ningún tipo de movimiento de maquinaria ni de personal, “sólo se quedaron 60 trabajadores, esto para resguardar los equipos y maquinarias”, expresó.
El reinicio de las obras en la construcción de la represa también depende del cumplimiento del acuerdo con los más de 200 trabajadores.
Asambleístas y fiscalización
El asambleísta departamental por Todos Por Cochabamba (TPC), Henry Paredes, manifestó que la Asamblea Departamental se ve imposibilitada de realizar acciones sobre el tema Misicuni, por la composición política, que es en su mayoría oficialista, “no se pueden hacer las respectivas denuncias sobre el tema Misicuni” para fiscalizar con mayor profundidad, dijo.
Para el asambleísta departamental, hay una mayoría “aplastante” que obstaculiza la labor de control por parte de los miembros de la Asamblea Legislativa Departamental.
El Movimiento Sin Miedo (MSM), a través de su jefe departamental, Mario Orellana, anunció que gestionará ante la Asamblea Departamental una invitación para el presidente de la empresa Misicuni, Jorge Alvarado, para que preste un informe detallado sobre la situación actual.
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