Luego de que la población paceña enfrentara en noviembre pasado la crisis del agua, en la ciudad de La Paz el consumo actual del líquido elemento se redujo en 8%, respecto a similar período del pasado año.
A la fecha, las cinco represas que operan para el suministro en la sede de Gobierno y del área metropolitana registran el 95% de su capacidad, lo que permite contar con 11 millones de metros cúbicos más, a diferencia de la pasada gestión.
El interventor de la Empresa Pública Social de Agua y Saneamiento (Epsas), Humberto Claure, señaló que uno de los resultados de la crisis que afectó a la zona Sur y ladera este de la ciudad permitió que la población aprenda a utilizar el agua con responsabilidad.
Acerca del racionamiento en el suministro de agua en horarios establecidos, entre enero y febrero de este año, el interventor anunció que el suministro se regularizará paulatinamente. A la fecha, algunos barrios cuentan con el suministro del líquido vital durante 16 y 18 horas, mientras que en otros la provisión se cumple ya durante las 24 horas.
Explicó que entre el 30 de junio del pasado año a la fecha, el almacenamiento de agua se incrementó de 31 millones a 42 millones de metros cúbicos, es decir una acumulación adicional de 11 millones, lo que asegura el acceso al agua. “Esto quiere decir que tenemos más agua y estamos con capacidad de resistir una sequía, si la situación se diera”, remarcó.
“Es importante llevar un mensaje de tranquilidad a la población”, señaló Claure, a tiempo de remarcar que existen proyectos adicionales que permitirán cumplir con el requerimiento de La Paz y su área metropolitana.
PROYECTOS ASEGURADOS
Por su parte, el titular del Despacho de Medio Ambiente y Agua, René Ortuño, anunció que a la capacidad instalada se suma la ejecución de otra tres represas, cuya ejecución está asegurada por el Gobierno central.
El ministro del área explicó que a la actual capacidad instaladas se suman las tres represas de la cuenca de Kaluyo, de las cuales dos se encuentran ya listas para iniciar obras, mientras que la tercera se halla en fase de adjudicación.
“Estas tres represas, en su conjunto, nos permitirá almacenar otros 7.5 millones de metros cúbicos de agua adicionales”, remarcó.
A estas nuevas represas se sumará una nueva línea 10 de pozos, cuya producción será inyectada a la red de suministro para La Paz y El Alto, denominada “San Felipe de Seque”. La perforación de los mismos fue iniciada en enero.
Según informó Ortuño, a la fecha ocho pozos están a muy poco de ser concluidos y los dos restantes se prevé que estarán listos hasta fines de agosto próximo.
“Tenemos una serie de obras que apuntan a mejorar nuestra oferta de agua, para que esté por encima de la demanda, de modo que siempre generemos reservas para la época seca”, puntualizó la autoridad, al señalar que uno de los objetos estratégicos sectoriales es actuar en función de los requerimientos a mediano plazo, con infraestructura pensada a largo plazo.
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